El cifrado sostiene la seguridad digital que protege desde mensajes privados hasta datos médicos y bancarios. Sin embargo, gobiernos democráticos impulsan proyectos que podrían debilitarlo en nombre de la seguridad o la lucha contra el crimen. Romper el cifrado no solo amenaza la privacidad: abre la puerta al abuso, la censura y la vigilancia masiva. Leer más