Cintia Agüero, vecina del barrio Betel, denunció públicamente maltrato animal porque encontró a una perra caniche muerta adentro de una bolsa de basura, en un zanjón. Cuando la levantó para poder enterrarla junto a un amigo, observó que tenía sus patas atadas, su hocico encintado, y que además tenía sangre en la boca. Su cuerpo aún no estaba duro ni muy frío, por lo que intuyó que la habían matadado hacía poco tiempo.
MALTRATO ANIMAL EN EL BARRIO BETEL: MATARON A UNA PERRA Y LA TIRARON EN UNA BOLSA DE BASURA CON EL HOCICO ENCINTADO Y LAS PATAS ATADAS
