Lala Pasquinelli es una de las administradoras de «Mujeres que no fueron tapa», un proyecto que nació hace 6 años, y que mediante las redes sociales pone en debate y reflexión las formas sutiles e insistentes, en la que la cultura masiva construye nuestros modelos de identidad. En octubre, a propósito de que estemos en La Costa, impusieron la consigna «hermana soltá la panza», contra las publicidades que nos bombardean en torno a hacer dietas, ejercicios, etc., para «llegar al verano», como si solo los cuerpos delgados y jóvenes fueran los únicos que están habilitados al disfrute y mostrarse en la playa o lugares de veraneo. De esta manera miles de mujeres aún envían sus fotos con sus panzas reales, sin editar, como las tenemos la gran mayoría de nosotras: con alguna estría, celulitis, cicatrices, etc.
Y es que en sus redes se cuestionan los estereotipos y cómo a las mujeres se nos enseña de maneras sutiles -en las canciones, series, películas, noticias, e incluso en los juegos cuando somos niñas-, cómo se «modela» nuestra identidad, que muchas veces nos trae sufrimiento y que responde a un contexto socio-económico y político. Nosotras, al ser altamente valoradas por la apariencia, como «cosas», muchas veces sentimos vergüenza de nuestro propio cuerpo, dado que siempre seremos criticadas por condiciones físicas, retirándonos de los espacios de poder por la violencia estética.
Y respecto a nuestras «panzas», lo que sucede, es que en las publicidades, películas y otras producciones audiovisuales, no se muestran, y en el inconsciente se nos instala la idea de que «estamos mal», de que nuestro cuerpo es «errado», imperfecto para una sociedad que nos exige ser «impolutas» a su manera violenta. Pero no, la mayoría no somos como ese modelo de la caja, computadora o celular nos muestra.
Gracias a esta gran campaña revolucionaria, muchas mujeres contaron sus historias de sometimiento: de cómo les enseñaban a meter la panza desde chicas, de cómo se negaban a usar un traje de baño en la playa, etc. Y cuando nos animamos a ocupar un espacio por primera vez nos empoderamos, tomamos poder sobre nuestro cuerpo y nuestra forma de ser en una acción que parece «chiquita», pero que en realidad es muy gigante cuando crecemos entre el sometimiento.
A Mujeres Que No Fueron Tapa las pueden encontrar en instagram, en facebook y también pueden visitar su página web donde están todas las campañas y trabajos que llevan adelante.
¡Gracias MQNFT! Por la gran consciencia que generan, incluso en lugares con menos habitantes como San Clemente, donde el «qué dirán si me ven así» impera tanto en nosotras.
Nota: Ludmila Beltramone
Redacción: Macarena Landeira