Vendedores de playa informaron que febrero está siendo muy bueno, pese al mal clima y el viento que a veces se hace presente. Si bien para Carnavales se proyecta mucho turismo y trabajo, los vendedores más antiguos resaltan que algunos, que son nuevos o más jóvenes, no respetan los códigos que tienen entre ellos, como dejar vender al que ya está en una misma playa desde hace más tiempo, y tener gestos entre compañeros.